SOLUCIÓN

Pero un buen día vi una demo de Velneo. Me pareció increíble. Tanto que, aunque me la llevé a casa y todo lo que hice funcionó perfectamente, no me lo creí y lo de dejé pasar.

Al año siguiente, volví a ver otra demo de Velneo, y afortunadamente esta vez sí hice un curso de formación en Velneo… ese fin de semana hice mi primera aplicación; un registro de documentos que con Clipper me hubiera llevado 1 mes.

En 3 meses tenía todos mis programas pasados a Velneo y funcionando perfectamente… y aún más sorprendente, disfrutaba programando con Velneo, tanto o más que con Clipper.

Desarrollar con Velneo es muy agradecido. En pocas horas vas viendo los resultados y la verdad es que hasta te diviertes programando. En pocos minutos descubres el porqué de algo que no funciona bien. En Velneo a la famosa ley de “si algo funciona no lo toques” le hacemos poco caso porque no tienes miedo de tocar el programa para que cada vez funcionen mejor las cosas, sean más fáciles de hacer o se vean de forma más agradable.

Ahora ya tenemos como clientes a casi 300 ayuntamientos desde Santander a Huelva y podemos darles un servicio máximo a un coste mínimo.